The Native Conservancy se enfrenta a una crisis urgente: Las comunidades costeras nativas de Alaska ven cómo sus aguas ancestrales se calientan y acidifican mientras las fuerzas industriales se llevan los recursos marinos que les han sustentado durante milenios. Fundada en 2003 en Córdoba, esta organización sin ánimo de lucro ayuda a los pueblos nativos de Alaska a garantizar la protección permanente de los hábitats en peligro de sus tierras ancestrales. El cambio climático y la explotación industrial amenazan tanto los recursos marinos como las tradiciones culturales de las que estas comunidades han dependido durante miles de años. TNC compra tierras críticas y las asegura en fideicomisos de conservación al tiempo que combina el conocimiento ecológico tradicional con el innovador cultivo de algas marinas para construir una "economía regenerativa verde-azul". Su trabajo beneficia directamente a los ancianos nativos de Alaska a través de entregas mensuales de alimentos tradicionales y crea oportunidades económicas sostenibles para las comunidades pesqueras que se enfrentan a un futuro incierto. Como primera organización de conservación de la tierra dirigida por nativos en Estados Unidos, demuestran que las soluciones impulsadas por los indígenas pueden restaurar tanto la tierra como el mar, reforzando al mismo tiempo la soberanía cultural.
Equipo de Native Conservancy investigando el cultivo de algas en un fresco día de Alaska, diciembre de 2021. Compartido por Jim Smith (@jimmwimm), Eyak Athabaskan, Director del Programa de Restauración y Subsistencia de Ancianos de Native Conservancy.
Dune Lankard, pescador de Eyak, fundó Native Conservancy después de que el vertido de petróleo del Exxon Valdez en 1989 le transformara de pescador en activista comunitario decidido a preservar el modo de vida de su pueblo y evitar futuros desastres medioambientales. Bajo su dirección, este grupo dirigido por nativos ha preservado más de un millón de acres de hábitat de salmón salvaje a lo largo de 3.500 millas de costa del Golfo de Alaska mediante la compra de tierras, derechos de desarrollo y servidumbres de conservación utilizando 430 millones de dólares de recursos del Exxon Restoration Fund. Su programa de cultivo de algas recibió una subvención de 9,3 millones de dólares de la National Fish and Wildlife Foundation, con el respaldo de Bezos Earth Fund, para desarrollar 20 granjas de algas a lo largo de 6.400 millas de costa. El programa Reclaiming Land & Water Ties de TNC cosecha, procesa y distribuye alimentos tradicionales a más de 50 ancianos al mes, mientras que su iniciativa OceanBack forma a trabajadores locales en técnicas de maricultura sostenible. Además, las prácticas especializadas conectan a los jóvenes nativos con las prácticas ancestrales a la vez que adquieren conocimientos modernos de conservación.
Dune Lankard, Presidenta y Fundadora de Native Conservancy fue nombrada galardonada con el James Beard Impact Award de 2025
Foto: cortesía de Native Conservancy