For a Better Bayou (FABB) es una organización comunitaria que lucha por un mundo más sano en el suroeste de Luisiana, donde la calidad del aire y las vías fluviales locales están muy contaminadas por refinerías de petróleo y gas, terminales de gas natural licuado (GNL) y otras instalaciones industriales. Fundada en 2023 en Lake Charles, donde se encuentra la mayor terminal de GNL del suroeste de Luisiana, FABB cree que la unión hace la fuerza y que el statu quo basado en los combustibles fósiles no es la única opción. Trabajando para construir un movimiento que permita la transición desde los combustibles fósiles hacia un futuro de energías renovables, educan al público sobre los riesgos medioambientales y sanitarios que plantean estas industrias y abogan por políticas que protejan a las comunidades. En 2023 se unieron a otras seis organizaciones del Golfo para solicitar a la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) que investigara y corrigiera los abusos sistemáticos de la Ley de Aire Limpio en Luisiana y Texas, pues creen que todo el mundo merece vivir y prosperar en una comunidad sana y sostenible, libre de los efectos nocivos de la contaminación por combustibles fósiles.
La comunidad se prepara para disfrutar de Zydeco, gumbo y un desfile en barco hasta la Cumbre del GNL, donde los camaroneros se reunieron para decir "Basta ya": Foto cortesía de For a Better Bayou.
Dirigida por James Hiatt, antiguo trabajador de una refinería local, la FABB trabaja junto a pescadores, camaroneros y residentes que comparten su preocupación por los actuales niveles de contaminación, los posibles aumentos a corto plazo y las repercusiones climáticas a largo plazo, rechazando las afirmaciones de la industria de que el GNL es "el más limpio de los combustibles fósiles". Aunque el GNL produce menos CO2 que el carbón o el petróleo durante la generación de energía, se compone de metano extremadamente frío procedente de la fracturación hidráulica, una sustancia 84 veces más perjudicial para el clima que el CO2 a corto plazo. La producción de electricidad con GNL libera el doble de gases de efecto invernadero que el gas natural ordinario, 14 veces más que la energía solar y 50 veces más que la eólica. FABB se unió a numerosos defensores para presionar con éxito al Presidente Biden para que suspenda la consideración de la expansión de las exportaciones de GNL en enero de 2024, celebrando la decisión como "una gran victoria hacia la protección de nuestras comunidades, nuestras familias, nuestra economía y nuestro clima."